El sábado 24
de mayo se celebra la fiesta de María, Auxilio de los Cristianos, que se
venera de manera especial en el santuario de She Shan, en Shanghai.
Se trata de la
única basílica de China. El gobierno comunista la confiscó en los años
cincuenta y en 1981 la entregó a la Asociación Patriótica Católica China,
fundada por el gobierno para independizarse de Roma.
En 2007 Benedicto
XVI estableció este día como Jornada de oración por los cristianos de
China. En una carta a los obispos del país, les invitó a renovar su
comunión de fe en Jesús y su fidelidad al Papa. También les pidió que la unidad
entre ellos fuera cada vez más profunda y visible.
Francisco
recordó esta Jornada durante la audiencia del miércoles.
PAPA
FRANCISCO
"Pido a
todos los fieles que recen para que, bajo la protección de la Madre
Auxiliadora, los católicos de China sigan creyendo, esperando y amando, y sean
en todo momento fermento de armoniosa convivencia entre sus compatriotas”.
A pesar de
las serias dificultades, se calcula que hay unos 67 millones de cristianos en
China y que la cifra irá en aumento.
(romereports)
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